Criba o tamiz casero para compost

A la hora de utilizar el compost preparado en casa, puede aparecer un problema según el uso que se le vaya a dar: la necesidad de tamizarlo o cribarlo.

Cuando el compost se añade a la tierra del huerto o a árboles frutales plantados en el suelo, no es necesario tamizarlo. Aunque vayan algunos fragmentos de materia orgánica parcialmente descompuesta o pequeñas piedras, trozos de ramas, etc, no importa demasiado. Terminarán de descomponerse igualmente, y no deberían causar ningún daño a las plantas.

En cambio, cuando el compost se utiliza como sustrato para semilleros (mezclado con otros materiales), es necesario que sea tamizado, pues las partículas gruesas pueden dificultar o impedir el nacimiento de las plantas. Por otro lado, los fragmentos vegetales a medio descomponer, pueden ocasionar la infestación del semillero y la muerte de las semillas o las jóvenes plantas.

Por esto último, es imprescindible contar con un tamiz que permita separar el compost fino de las partículas gruesas que pudiera contener, especialmente cuando se añadieron restos de poda triturados, o desperdicios de cocina a la pila del compost.

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Materiales, herramientas y montaje

Se pueden considerar al menos dos maneras de conseguir una criba casera a muy bajo coste, o incluso gratis.

Opción 1: reutilizando cesta de freidora

En este caso solo hay que hacerse con la cesta de una freidora que ya no sirva, y sin más se puede utilizar como tamiz o criba.

No es necesario modificarla, funciona realmente bien tal y como está. Si se desea, se le puede quitar el mango, pero no es necesario.

Si la freidora es tipo sartén, entonces la cesta será redonda, como la de la imagen adjunta, mientras que si es eléctrica, normalmente el cesto será rectangular. Todos sirven siempre que tengan una trama en forma de red. Los hay que constan solo de unos alambres paralelos, pero esos no sirven para tamizar.

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Opción 2: con malla metálica

● Malla metálica de 5x5mm de luz, también llamada malla ratonera o para ratones

● Alicates, tenazas o tijeras para lata

● Alambre acerado grueso, como el que se usa como tensor para realizar vallados.

● Alambre delgado

Todos estos materiales y herramientas se pueden comprar en ferreterías y tiendas de bricolaje.

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Montaje

Consta de 4 pasos pero que en realidad son realmente sencillos de realizar.

➊ Cortar un trozo de malla

Con la forma que se aprecia en la figura 1 de la imagen de más arriba. Tiene que tener esa forma para que sea más sencillo doblar la malla para formar una cesta.

En cuanto a las medidas, unos 30 cm están bastante bien para este uso. Se cortar primero un cuadrado de 30x30 cm, y seguidamente se le recorta en cada esquita otro cuadrado más pequeño de 5x5cm. Esto dará una criba con 5 cm de alto, pero si se quiere que sea más honda, se puede recortar a 6x6 o incluso 7x7, teniendo en cuenta que cuanta más pared, menos base, salvo que se aumente la medida general de 30x30.

➋ Doblar para formar una cesta

Una vez que la malla está cortada con la forma adecuada, se procede a doblar 90 grados las solapas laterales, dejándolas perpendiculares a su posición original.

En la figura número 2 se puede ver como quedaría viéndola desde arriba, una vez que las solapas han sido dobladas hacia el centro.

Para que se mantenga en la posición deseada, conviene atar con alambre delgado las uniones entre las solapas laterales. Eso las mantendrá en su sitio, y posteriormente impedirá que se forme una abertura por dónde escaparía el compost, tierra, o lo que sea que se esté tamizando.

➌ Cortar y doblar alambre

Ahora es el turno del alambre grueso. Hay que medir todo el borde superior de la criba y cortar un trozo de alambre de la misma medida o un poco más.

Seguidamente se va colocando por el borde de la malla, empezando en el centro de un lado, y haciendo una doblez en ángulo recto al llegar a cada una de las esquinas. Al final tiene que quedar un cuadrado de alambre del mismo tamaño que la criba, como puede verse en la figura 3.

➍ Instalar alambre en la criba

Finalmente, se hace coincidir el cuadrado de alambre con el borde del tamiz, y con el alambre más delgado, se va atando para que quede bien sujeto. Se puede atar por zonas, colocando un atadura cada 2 cm por ejemplo, o bien coser todo el borde con alambre, haciéndolo pasar por los agujeros de la malla y por encima del marco de alambre grueso.