Platanera cuidados
Riego
La platanera es una planta que demanda grandes cantidades de agua, especialmente en verano. En los días secos y soleados, sobre todo en suelos arenosos, poco profundos y/o con cierta pendiente, será necesario el riego frecuente para mantener la humedad en las proximidades de la planta.
Conviene regar cerca de la planta, puesto que la platanera no extiende mucho sus raíces. Podemos hacerlo mediante riego por goteo ―lo más recomendable― o, si tenemos pocas plantas, directamente con la regadera o manguera. Habremos realizado antes un pequeño alcorque alrededor de la platanera para que el agua no se escape mientras el terreno la absorbe.
Otro aspecto a destacar, es que la platanera solo aprovecha bien el agua del suelo cuando la aireación de éste es suficiente, por tanto habrá que garantizar una buena estructura del suelo, aportando, por ejemplo, materia orgánica.
El buen drenaje del suelo también es muy importante. Si el nivel freático ―la capa de agua― se encuentra a menos de 60 cm de profundidad en algún momento del año, conviene realizar drenajes para evacuar el exceso.
Acolchado
Como siempre defendemos, la utilización de acolchados es una práctica muy recomendable para mantener durante más tiempo la humedad del suelo, favorecer la actividad biológica, aumentar la fertilidad, la aireación, etc. especialmente cuando acolchamos con materiales orgánicos, que se al descomponerse aportarán materia orgánica y nutrientes.
Hierbas competidoras
La vegetación que crece de forma espontánea alrededor de la platanera constituye una importante competencia por el agua, los nutrientes y, sobre todo al principio, la lu y, además, puede hospedar plagas y enfermedades del cultivo. Habrá que controlar, por tanto, el desarrollo de estas hierbas para que no se impongan.
Se considera la fase crítica el periodo de tiempo comprendido entre la siembra y los primeros 6 meses. En esta fase crítica, será muy importante mantener el suelo alrededor de la platanera libre de plantas competidoras.
Entre los métodos más ecológicos para el control de las hierbas competidoras están, el acolchado del suelo y las escardas manuales o con escardador.
Raleo de hijuelos
La platanera emite unos brotes o hijuelos cerca de su pie, que constituirán el futuro del cultivo ―ya que el pie principal se cortará después de la cosecha―. Pero no todos los hijuelos son aptos para fructificar y, por tanto, habrá que seleccionar los mejores y eliminar los más débiles, dañados o enfermos.
Se suelen dejar al menos dos hijuelos, que suelen llamarse "hija" y "nieta". Cuando se cosechan los plátanos y se corta la planta "madre", la hija pasa a sustituirla, la nieta se convierte en hija y habrá que seleccionar una nueva nieta.
La eliminación de hijuelos es frecuente hacerla en 3 o 4 ocasiones a lo largo del año y es muy importante emplear herramientas de corte afiladas y perfectamente desinfectadas.
Limpieza de falso tallo
Se trata de retirar las vainas de las hojas que cubren el tallo ―en realidad falso tallo― de la platanera, para evitar que sean foco de infecciones o las plagas se oculten en ellas. Se eliminan manualmente cuando están secas.
Deshojado
Como su nombre indica, consiste en eliminar las hojas viejas, dañadas o dobladas por el viento, amarillas y, en general, aquellas hojas que suponen un riesgo para la planta y no aportan mucho a ésta.
También se deben cortar las hojas que puedan rozar con el fruto, en la época en que éste está madurando, para evitar que se produzcan daños en la piel de éste.
No se debe dejar nunca a la platanera con menos de 7 hojas.
Destronque
Es un cuidado básico de la platanera que se debe realizar para evitar que la producción decaiga por la excesiva acumulación de pies en la misma zona.
Consiste en cortar el tallo a ras de suelo ―hay quien lo hace más arriba― una vez que se han cosechado los plátanos y tapar el tocón con ceniza y tierra para evitar la proliferación de plagas y enfermedades.
Apuntalamiento
Se trata de colocar algún soporte mediante madera, metal, cuerda, etc. para evitar que las plataneras que caigan con el peso de los frutos, el viento, un mal anclaje, etc.
Poda de flor
También se conoce como desbellote y consiste en cortar la flor de la platanera unas 3 semanas después de que haya florecido, para favorecer el engorde de los plátanos y evitar que pueda ser un foco de infección. El corte se hace a unos 5 cm de la última mano.
Se realiza solo en las variedades o clones cuya flor no se desprende rápidamente tras la floración.
Como siempre, las herramientas de corte han de estar perfectamente desinfectadas.
Poda de manos
Se cortan las últimas manos ―si no sabes lo que es una mano consulta de dónde salen los plátanos― del racimo para que las que quedan engorden mejor los frutos.
Esta poda solo se realiza en las variedades o clones cuyos racimos producen muchas manos.
Embolsado
Consiste en poner una bolsa plástica adecuada alrededor del racimo para favorecer que los plátanos engorden más rápido, alcancen antes el estado de cosecha, tengan mejor aspecto, no sean atacados por plagas y no se quemen por el sol.
Soy ambientólogo, especialista en Gestión de la Calidad y del Medio Ambiente, autodidacta y embarcado desde hace casi dos décadas en el mundo web, amante de la naturaleza y de la vida saludable. Tengo un gran huerto familiar ecológico.