Cómo hacer esquejes de hiedra
Como tantas cosas en la vida, antes de ponerse manos a la obra, hay que planificar todo lo que se va a hacer, determinar cuándo es el mejor momento o los pasos que se van a seguir. Empecemos pues!
¿En qué época?
Como sucede con la mayoría de las plantas que se pueden multiplicar mediante esquejes, ciertas épocas del año son mucho más favorables que otras, siendo en estas más fácil que la planta arraigue.
Ciertamente, en zonas de clima suave, se puede intentar esquejar la hiedra en cualquier momento del año, y seguramente se lograrán buenos resultados.
Para climas fríos, hay que hacerlo a mediados de la primavera o a finales del verano, pero mejor en la primera. También en verano podría resultar si se protege el esqueje con un plástico transparente y se deja a la sombra.
En cambio, en climas muy cálidos y secos, a principios de la primavera o a mediados del otoño son buenos momentos para intentarlo.
Cómo enraizar los esquejes rápidamente✔ Aspectos que influyen en su rapidez y cómo acelerar el proceso...
Procedimiento paso a paso
Será necesario disponer de sustrato universal o mejor sustrato para semilleros, una maceta de al menos 10 cm de alto y unas tijeras afiladas y desinfectadas (también puede servir una navaja pero es menos práctica)
➊ Recoger los tallos
Hay que tener localizada al menos una planta de hiedra de la que extraer los esquejes, que pueden ser de dos tipos según su edad.
Tallos jóvenes
Son los brotes tiernos que se encuentran en los extremos de las ramas de la hiedra. Suelen tener las primeras hojas de menor tamaño y de un color verde más claro.
De estos se debe cortar todo el brote y no solo la parte más tierna del final.
Las plantas surgidas al esquejar estos tallos serán vigorosas y tenderán a crecer mucho en altura (trepar)
Tallos viejos
Cuando la planta de hiedra ya ha dado fruto, los tallos de la parte baja de esta se vuelven más duros y de color más claro.
Si se emplean estos tallos viejos para realizar esquejes, la planta resultante tenderá a formar una especie de arbolito bajo, con poca tendencia a trepar.
En ambos casos, se cortan tallos de 50 ó 60 cm de largo para que de cada uno se puedan sacar varios esquejes. También se pueden tomar más cortos, pero entonces de ellos se podrán obtener menos esquejes.
➋ Preparar el sustrato
Esto tiene poco que explicar. Se llena la maceta con sustrato y se le dan unos golpes contra el suelo para que se asiente ligeramente. No es necesario apretarlo con la mano.
Hay que dejar sin llenar al menos unos 2 cm en la parte superior de la maceta, para que luego sea más fácil regar.
➌ Cortar los esquejes
Desde la punta del tallo, contar unas 4 ó 5 yemas ―u hojas― y cortar medio centímetro por debajo de la última. Repetir esto hasta agotar todo el tallo.
Si en el extremo del tallo se encuentra un brote tierno, es mejor cortarlo, y comenzar a partir de esa zona.
Ahora, una vez dividido en tallo original de hiedra en varios esquejes con al menos 4 hojas cada uno, hay que dejar solo las dos hojas superiores y cortar las inferiores cerca del tallo pero sin lesionarlo.
➍ Plantar
Con un palo, lápiz o con el dedo, realizar un agujero en el sustrato tal que quepa el tallo del esqueje.
¿Hormonas de enraizamiento?
Aunque pueden ayudar a que las raíces aparezcan antes, lo cierto es que la hiedra puede emitirlas sin necesidad de hormonas.
Si ya se dispone de ellas, entonces se pueden emplear en todos o en una parte de los esquejes plantados, pero si hay que comprarlas expresamente no compensa salvo que se necesite que las raíces aparezcan lo más rápido posible.
Continuando con lo anterior, si la maceta tiene el ancho suficiente, se puede plantar en ella más de un esqueje, dejando unos 3 ó 4 cm entre cada uno.
Una vez introducido el esqueje en la tierra, justo hasta casi la primera hoja, se aprieta el sustrato con los dedos hacia el esqueje y hacia abajo. Este paso es muy importante para garantizar que el contacto entre el esqueje y la tierra sea máximo.
➎ Regar
Por último, como en cualquier siembra o trasplante, hay que finalizar dando un primer riego que asiente el sustrato y expulse el aire sobrante de su interior.
Este primer riego es fundamental porque permite que el tallo de los esquejes quede rodeado de una fina película de agua después de la cual se encuentra el sustrato. Al quedar tan próximo, el sustrato cederá la humedad al tallo a medida que la necesite, evitando que se seque.
Durante todo el tiempo que los esquejes de hiedra estén enraizando, la tierra tiene que mantenerse siempre húmeda pero nunca encharcada.
Cómo realizar esquejes de árboles✔ Muchos árboles que ves en el día a día podrías multiplicarlos tomando un pequeño trozo de ellos...
¿Dónde colocarlos?
Los esquejes necesitan mucha luz y una buena temperatura, pero nunca deben colocarse a pleno sol ni en lugares con corrientes de aire, ya que ambas cosas los pueden deshidratar en exceso y acabar con ellos.
El interior de una ventana de casa es un sitio ideal. También una galería o un pequeño invernadero.
Si no se dispone de un lugar apropiado y los esquejes van a estar expuestos al sol, entonces hay que cubrirlos con una bolsa de plástico transparente con algunos orificios y darles algo de sombra.
¿Cuándo enraizarán?
Si todo ha ido bien, la nueva hiedra tendrá ya raíces incluso antes de que pase un mes desde el momento en el que se plantó el esqueje, pero esto no siempre es así.
En realidad no importa mucho cuanto tiempo tarde el proceso, lo realmente interesante es saber detectar cuándo la planta está ya arraigada. En general, cuando se observe un crecimiento del brote y de nuevas hojas, significará que ya está tomando nutrientes del suelo y, por tanto, que ya tiene raíces.
Soy ambientólogo, especialista en Gestión de la Calidad y del Medio Ambiente, autodidacta y embarcado desde hace casi dos décadas en el mundo web, amante de la naturaleza y de la vida saludable. Tengo un gran huerto familiar ecológico.