Cómo hacer una huerta en macetas
¿Alguna vez intentaste cultivar algo en una maceta y no resultó? Quizás escuchaste que es muy complicado cultivar hortalizas en tiestos y eso te desanima.
Es cierto que cuando una planta crece en un volumen pequeño de suelo los cuidados que requiere se intensifican, pero con los conocimientos adecuados es muy fácil obtener buenos resultados.
Incluso alguien que nunca ha cultivado nada, puede cosechar sus propias hortalizas si sigue las recomendaciones que va a encontrar en este artículo.
Quédate hasta el final del artículo y verás que puedes comenzar ya mismo tu maceto-huerto.
Materiales para un huerto urbano
Es posible que hayas leído o escuchado que hace falta tal cosa o tal otra, y que si no la tienes es mejor que no pierdas el tiempo por que no lograrás buenos resultados. No es cierto!
No son necesarios costosos artículos de jardinería para tener una huerta en casa. Al fin y al cabo, lo que importa realmente es la función que hacen las cosas, no el diseño que tengan o su marca. Lo veremos a continuación.
✪ Macetas
La elección de las macetas que conformarán el huerto urbano es uno de los puntos más importantes, ya que pueden condicionar el aprovechamiento del espacio o ser un auténtico problema a la hora de mantener las plantas nutridas e hidratadas.
En realidad no tienen por que ser macetas, puede ser cualquier tipo de recipiente que cumpla estos requisitos:
✦ Volumen o capacidad suficiente para la planta o plantas que va a albergar.
✦ La profundidad es otro factor decisivo, especialmente para algunas hortalizas.
✦ Tiene que estar fabricada con materiales inertes para que no se descomponga y libere al sustrato sustancias perjudiciales.
✦ Se tiene que poder perforar su base sin que se rompa y sin lastimarnos.
Buenos materiales para las macetas del huerto son el polietileno de alta densidad (HDPE) u otros plásticos similares, la cerámica y la terracota, el cemento, la piedra, la madera (que no esté barnizada ni pintada), el acero inoxidable, el mimbre, etc.
No mencionamos el vidrio por que, aunque serviría, es complicado y peligroso realizar agujeros en él sin las herramientas y las medidas de seguridad adecuadas. Se pueden emplear recipientes de vidrio si ya están perforados en la base.
Derivados del hierro u otros metales oxidables (o tóxicos) tampoco son recomendables, a menos que los forremos por dentro con plástico.
✰ Recipientes reutilizados para macetas
Muchas veces lo más sencillo es ir al centro de jardinería —o a cualquier bazar— y comprar directamente las macetas. Serán bonitas y las tendremos al instante, pero no es la opción más sostenible.
Lo mejor es siempre reutilizar materiales que de otra forma acabarían en la basura, y darles una segunda vida como macetas para las plantas de la huerta.
- Cajas de madera, de porexpan o de plástico, como las cajas de frutas y verduras que suelen utilizar en las fruterías y otros comercios.
- Botellas, garrafas, tuppers de plástico.
- Boles viejos o cazuelas de cerámica, barro o acero inoxidable.
- Telas cosidas o atadas para formar una bolsa que luego se cuelga del techo de la pared con cuerda.
- Neumáticos apilados y forrados por dentro con plástico.
Si se dispone de suficiente espacio, puede resultar muy interesante construir una mesa de cultivo con palets, en que resultará más cómodo cultivar hortalizas de ensalada de forma continuada.
Y en definitiva, cualquier cosa que pueda contener un volumen suficiente de tierra en su interior.
✰ Volumen de las macetas
En la siguiente imagen se pueden ver los volúmenes recomendados que han de tener las macetas para cada hortaliza de interés para el huerto casero.
✪ Sustrato
Junto con las macetas, el sustrato es el otro pilar sobre el que se sostiene la salud de un maceto-huerto.
Hay que tener en cuenta que la porción de "tierra" que tendrán las plantas a su disposición está limitado por el volumen de la maceta y, por tanto, el sustrato ha de contener todos los nutrientes y el agua que la planta necesitará tomar por las raíces.
Cuanto más justa sea la maceta mejor tendrá que ser el sustrato. Si es muy grande no importa tanto, pues las raíces tendrán mucho espacio para explorar.
Un buen sustrato para un huerto en macetas ha de tener:
✦ Todos los nutrientes en las cantidades y proporciones necesarias, pero además, encontrarse en formas asimilables.
✦ Una estructura esponjosa y ligera que facilite el desarrollo de las raíces, que permita el intercambio de gases y el drenaje del agua, pero al mismo tiempo retenga una gran cantidad de ella sin encharcarse.
✦ Que esté libre de patógenos y sustancias tóxicas.
✦ A poder ser, que no contenga turba, ya que es un recurso cuya extracción acaba con grandes espacios naturales, las turberas.
El sustrato se puede elaborar de forma casera a partir de tierra, compost u otros abonos orgánicos, perlita o vermiculita, arena y algunas fibras naturales como la de coco, entre otros.
Ya veremos más adelante cómo prepararlo, pero para empezar, lo mejor es comprar uno de calidad que esté ya preparado, y que a pesar de que será un poco más caro, como la cantidad no va a ser muy grande, nos vamos a gastar muy poco.
El éxito o el fracaso de un huerto en macetas se debe en gran medida al sustrato y a las macetas empleadas.
✪ Semillas o plantas
Este aspecto es importante desde el punto de vista de qué es lo que se puede plantar y lo que no en un huerto urbano, o mejor dicho un huerto en casa.
En realidad no hay nada que no se pueda plantar, pero muchas hortalizas no son adecuadas para este propósito por lo siguiente:
✧ Se desarrollan demasiado y ocupan grandes espacios: La calabaza, el melón, la sandía, etc.
✧ Necesitan cultivarse en grandes cantidades para obtener un cosecha aceptable: La patata, el maíz, los guisantes, los garbanzos, etc.
Esto es más fácil de entender de lo que parece. Veámoslo con un par de ejemplos.
En un espacio limitado como una casa, una planta de calabaza —que puede entenderse a lo largo de varios metros— no parece algo práctico para cosechar tan solo 4 o 5 calabazas al final del verano.
En el caso de las plantas del segundo grupo, aunque cada planta no ocupa mucho, habría que plantar decenas o cientos de ellas para obtener una cosecha interesante.
Por ejemplo, un pié de maíz suele dar 2 o 3 mazorcas, y alcanza fácilmente una altura superior a los 2 metros y un ancho de 50 o 60 cm con las hojas extendidas.
Con los guisantes o los garbanzos pasa lo mismo, cada planta puede darnos un puñado de guisantes. Demasiados meses esperando para recoger solo unos cuantos guisantes, ¿verdad? Realmente no compensa ocupar el espacio para eso.
La patata igual. Cada planta da pocas patatas y necesita un buen volumen de sustrato para desarrollarse, tanto como que en el espacio de una bañera solo cabrían 4 o 5 plantas.
✰ Que plantar en un huerto en macetas
Aquí pondremos hortalizas que consideramos interesantes para un huerto urbano o maceto-huerto, especialmente por que se pueden cosechar durante muchos meses sin necesidad de reiniciar el cultivo. Esto es lo ideal para tener en casa; una despensa siempre lista y creciendo de forma contínua.
Vamos a hacer dos grupos, uno para aquellas personas que se enfrentan por primera vez al cultivo de hortalizas y otro para gente que ya tiene experiencia.
➤ Principiantes
Para empezar con buen pié y no frustrarse, lo mejor es comenzar con alguno de los siguientes cultivos —o varios de ellos:
• Hortalizas de ensalada: lechuga, canónigo, rúcula, rabanito.
• Hortalizas de hoja: acelga, espinaca, col.
• Hortalizas de fruto: pimiento, pepino, judía, berenjena, fresa.
También aromáticas como el perejil o el cilantro.
➤ Avanzados
Además de las anteriores: tomate, zanahoria, ajo, cebolla, cebollino, puerro, calabacín, espárrago, y cualquiera que se adapte al cultivo en maceta.
Esto es para que veas todo lo que puedes cultivar, pero insistimos, empieza por los del primer grupo, por ejemplo por la lechuga y el rabanito.
El pepino es una planta muy interesante para plantar en un huerto en macetas, ya que una sola puede producir pepinos suficientes para una familia pequeña y guiándola en vertical o a lo largo de una barandilla ocupará muy poco espacio.
✪ El agua
Como todo huerto, aunque esté constituido por macetas, necesitará de agua para regar siempre que sea necesario, lavar utensilios, etc.
En el caso de agua para riego, es imprescindible que sea de calidad y que esté libre de cloro u otros químicos añadidos para su potabilización.
Lo ideal es siempre utilizar agua de lluvia, por ejemplo recogiendo la que cae en el tejado o sobre una terraza, pero claro, hay que disponer de espacio para almacenarla en bidones.
En caso de tener que emplear agua de grifo, habrá que llenar un recipiente (o varios) con la cantidad que vamos a necesitar para regar 2 días. Dejaremos el recipiente abierto durante 2 días, para que el cloro se evapore, y luego ya la podremos utilizar para regar. Antes de que se termine tendremos que rellenarla de nuevo para que cuando la necesitemos esté lista.
Si la necesitamos con urgencia, siempre podemos hervirla durante 5 minutos en una olla con la tapa quitada. Cuando enfríe ya la podremos usar.
Cómo empezar un huerto en casa
Antes hablamos de las macetas y del sustrato, como dos de los aspectos más importantes a la hora de garantizar el éxito de un huerto de este tipo. Pues bien, ahora toca hablar de los factores externos, es decir, de lo que solo podremos planificar pero raramente cambiar. ¿Complicado? Verás que no.
Se trata del espacio, la luz, la temperatura y el viento, entre otros menos importantes. Estos tres factores son cruciales —especialmente los dos primeros.
Si el huerto se encuentra dentro de casa, en un espacio cerrado, el viento no se tendrá en cuenta.
Elegir bien el lugar de la casa donde instalaremos el huerto, pasa por estudiar cómo se presentan estos tres (o cuatro) aspectos en la zona a lo largo del tiempo durante el cual la huerta tendrá actividad. Puede ser solo un par de meses, medio año o incluso sin interrupción.
✪ Espacio
Este es uno de los principales inconvenientes con los que hay que lidiar cuando se está planificando la realización de un huerto en casa.
Es poco frecuente que en las viviendas urbanas sobre el espacio, al menos en las de la mayoría de la gente, y por eso hay que ingeniárselas para aprovecharlo de la mejor manera posible, a fin de obtener mayor producción manteniendo un cierto orden y accesibilidad.
✰ Horizontal
Lo más fácil es ocupar el espacio del balcón o terraza de forma horizontal, disponiendo unas macetas al lado de otras.
En espacios amplios es lo más práctico y rápido, puesto que no requiere apenas instalación.
Tener las macetas en esta disposición permite acceder a ellas y cambiarlas de lugar sin dificultad.
✰ Vertical
En muchas ocasiones, los espacios para el huerto son pequeños y para no bloquear totalmente el acceso con macetas por aquí y por allá, se pueden apilar de distintas formas para que vayan ocupando espacio en la vertical, quedando el suelo más despejado.
Fijándolas en la pared, en estanterías, colgándolas del techo, de un balcón o construyendo un huerto escalonado, con forma de escalera o de pirámide.
Lo ideal, especialmente en espacios medianos y pequeños, es recurrir a los dos sistemas. Poner las macetas más grandes en el suelo y las de menor tamaño distribuirlas verticalmente de alguna de las formas mencionadas.
✪ Luz: horas de sol
Las plantas obtienen la energía de la luz solar y, por ello, el huerto deberá recibirla de forma directa al menos durante parte del día. Esto es prioritario.
En cuanto a la luz, la ubicación ideal para el huerto en macetas es aquella que reciba la mayor cantidad de horas de sol al día. En caso de no se disponga de luz solar directa, habrá que elegir la zona que tenga la mayor claridad.
Al menos 4 horas de sol
- Hortalizas de hoja: acelga, apio, col y similares, espinaca, lechuga, puerro, rábano.
Entre 6 y 8 horas
- Todas las anteriores.
- Hortalizas de raíz: remolacha, zanahoria; y algunas de fruto: guisante, haba, fresa.
Más de 8 horas
- Todas las anteriores.
- Hortalizas de fruto: berenjena, calabacín, judía, pepino, pimiento, tomate.
- Otras: ajo, cebolla, perejil.
✪ Temperatura: calor o frío
Excepto en los huertos que se encuentren dentro de casa y que disfruten de un ambiente climatizado, los que permanezcan en el exterior se verán expuestos a las temperaturas propias del lugar en cada estación del año.
En climas fríos —latitudes próximas a los polos o en zonas de montaña— es muy probable que sea complicado mantener el huerto vivo durante los meses más duros.
En esas zonas, quizás solo se podrán plantar cultivos de invierno durante buena parte del año, ya que resisten mejor las bajas temperaturas.
Por lo general, incluso la mayoría de estos cultivos de invierno dejan de crecer cuando las temperaturas bajan de 8 ℃.
Para los climas cálidos hay más posibilidades, puesto que con utilizar elementos que proyecten sombra suele ser suficiente para bajar la temperatura. Mojar frecuentemente el suelo también ayuda a bajar la temperatura ambiente.
El zonas muy cálidas se puede cultivar casi cualquier hortaliza, con excepción de las de hoja —al menos durante la época cálida— que tienden a subirse a flor con facilidad cuando las temperaturas son altas.
✪ Planificación del espacio
Teniendo en cuenta la luz y la temperatura, tendremos que planificar el espacio del que disponemos para instalar el huerto en macetas en la mejor ubicación posible —dentro de las posibilidades que ofrece la casa.
Dibujaremos un plano de la terraza o balcón y marcaremos las zonas iluminadas y de sombra a medida que se va moviendo el sol conforme pasa el día. El objetivo es establecer varias zonas en función de las horas de sol que reciben.
Una vez que tengamos esta información, ya podremos distribuir las macetas en el espacio, según las hortalizas que van a crecer en ellas. Al tratarse de macetas siempre se podrán mover si vemos que no están todo lo bien colocadas que deberían.
Hora de sembrar
Una vez colocadas las macetas adecuadas para cada planta o plantas que queremos cultivar, solo queda sembrarlas o traspantarlas a estas.
Es muy importante que elijamos bien el momento del año en que vamos a realizar las siembras o los trasplantes, especialmente si el huerto está expuesto a la intemperie y el clima es duro.
Para ello, lo mejor es consultar estos calendarios de siembra y planificar los tiempos para cada planta.
Cuando llegue el momento de realizar la siembra seguiremos estos sencillos pasos para sembrar plantas, que son de aplicación a todas y cada una de ellas.
Y estos consejos son útiles para aquellas que vayamos a trasplantar. Ya sean plantas que compramos en un vivero o procedentes de un semillero realizado previamente por nosotros.
Como ves, es bastante sencillo comenzar un huerto en casa utilizando unas pocas macetas e incluso recipientes reutilizados. En este sitio tienes mucha información para ir aprendiendo cosas más específicas acerca de cada cultivo en particular.
Soy ambientólogo, especialista en Gestión de la Calidad y del Medio Ambiente, autodidacta y embarcado desde hace casi dos décadas en el mundo web, amante de la naturaleza y de la vida saludable. Tengo un gran huerto familiar ecológico.